Cámaras en el Trabajo: ¿Pueden grabarte trabajando?
Una forma de grabar en el trabajo legalmente es determinar el punto de vista del interesado. Por un lado la videovigilancia extrema viola varios derechos fundamentales de los trabajadores relacionados con la dignidad y su honor.
Por otro lado, si es el trabajador que quiere grabar su entorno debe justificar su conducta cumpliendo con una serie de procedimientos para no ser acusado de espionaje industrial.
Cuando un empresario puede grabar legalmente en el trabajo
Sin que haya un consentimiento previo, el empresario puede vigilar con cámaras espías de seguridad, siempre que el tratamiento de las imágenes obtenidas sea para fines laborales.
Según las excepciones previstas en la Ley de Protección de Datos, en algunas ocasiones las grabaciones forman parte del cumplimiento de las obligaciones laborales.
El empresario debe informar a sus trabajadores la existencia de las mini cámaras espías de vigilancia, pero no es necesario que precise su alcance o propósito de la medida.
No basta con colocar un aviso razonablemente visible para que el empresario de por cumplida su obligación con los derechos del empleado.
También debe entregarle un comunicado adicional en el que explique que las grabaciones son para fines laborales.
Condiciones para que una empresa aplique medidas de videovigilancia legalmente
Se deben cumplir una serie de obligaciones para que una empresa aplique medidas de videovigilancia totalmente legales:
- La finalidad de las grabaciones debe ser el control de las obligaciones del empleado en cumplimiento con el contrato.
- Constancia de que el empleado ha sido positivamente informado de la existencia de las Cámaras espía alta definición.
- No es necesario informar su ubicación exacta o alcance de las mismas, tampoco lo que se hará con las grabaciones obtenidas (obviamente respetando el derecho de difusión de imágenes sin consentimiento previo).
- Respetar los espacios privados como vestidores, baños, y particularmente en los espacios de descanso, donde está tajantemente prohibida la grabación aunque sea de sonido.
Si se obtienen de forma legal, las grabaciones obtenidas pueden usarse como prueba de conducta fraudulenta del trabajador. Este tipo de comportamiento es común después de haber recibido alguna sanción. También puede presentarse que arremeta contra la integridad de los equipos de trabajo después de ser despedido, e incluso tenga una conducta agresiva con el resto de los compañeros de equipo.
En vista de lo anterior, podrás colocar una cámara camuflada en el sitio de trabajo justo frente a sus ojos sin que lo noten con el sensor digital de humo. Es un dispositivo que graba video en HD, es de visión nocturna, tiene sensor de movimiento y es control remoto.
Este tipo de equipo es ideal para las situaciones anteriores, ya que suele pasar desapercibido dentro de la empresa, y por lo tanto el agresor no sentirá que está siendo grabado.
Cómo un empleado puede grabar legalmente en el trabajo
En la mayoría de los casos, los trabajadores que desean contar con una grabación esperan demostrar que son acosados. Si este es tu caso, la botella de agua con cámara oculta graba de 2 a 3 horas con calidad HD, y puede almacenar hasta 128 GB de información.
Es una cámara que pasa desapercibida y puedes colocarla estratégicamente frente a tu jefe en el mismo instante en que te esté agrediendo.
El acoso laboral es una de las principales razones de estrés dentro de una compañía, Sin embargo, el trabajador está ampliamente protegido por las normas del país, siempre que tenga pruebas del hecho.
Esto representa dificultades de legales en muchos casos, incluso podrían traer represalias como consecuencia, que van desde acusaciones de violación de la intimidad hasta espionaje industrial.
Situaciones en las que un trabajador se ve obligado a efectuar una grabación
La legalidad de las grabaciones puede verse influido en la persona encargada de hacer la grabación, veamos tres condiciones:
1. Cuando es la persona agredida quien hace la grabación de una conversación en la que participa para evidenciar la comisión de un delito, se le llama autobugging o autoingerencia. En este caso, te recomendamos el uso de la mini cámara vigilancia en forma de botón de camisa, te permite 10 horas de autonomía y tiene configuración para encendido por fecha y hora.
2. En una situación en la que un tercero efectúe la grabación con el consentimiento de una de las partes, con la intención de corroborar cierta información. Uno de tus compañeros de trabajo podría colaborar usando un llavero espía para registrar la conversación.
3. La tercera opción recae cuando un tercero ajeno a la conversación hace la grabación sin que ninguno de los participantes tenga conocimiento de la misma. Coloca un cenicero espía en una mesa común, en caso de que alguien fume. O podría usar el soporte cargador móvil con cámara oculta de autonomía limitada y detección de movimiento y 120° de ángulo de visión del que nadie sospechará.
Esta opción suele usarse para demostrar que ha habido una conspiración contra una persona, que podría ser uno mismo, un compañero de trabajo, el jefe o la empresa.
Cómo grabar legalmente en el trabajo
Las grabaciones de las conversaciones propias no vulneran ningún derecho, por lo que es completamente legal, es especial si las efectúa el agredido y espera conseguir las pruebas para presentarlas en un juicio.
Otra cosa muy distinta sería si la intención de la misma sea para divulgación, porque podría incurrir en difamación o desprestigio. Y coincidiría mucho en el caso del espionaje empresarial si el contenido de la grabación sostiene información relativa al trabajo desempeñado dentro de la compañía, así como funciones o procedimientos.
En el caso de que participes en una conversación en la que tu interlocutor sea un jefe o compañero agresor, cuídate de no provocarlos. Para efectuarla has uso de la cámara de tu marco de fotos espía mientras conversan.
Para que la prueba sea legal, las declaraciones de la persona que te está acosando deben ser libres de coacción. De otra forma, la prueba grabada será ilegal y por lo tanto anulada.
Incluso si estás recibiendo llamadas de tu jefe donde te agrede podrías colocar un grabador de llamadas telefónicas con autonomía ilimitada de fácil instalación, y que además grabe la fecha y hora.
Por otro lado, un juez podría permitirte la grabación de una conversación en la que no participes. Para ello él debe emitir una autorización judicial en caso de estar en plena investigación incriminatoria. En este tipo de caso, podrías hacerlo de forma discreta con un llavero que sirve como grabadora de sonido espía.
Como has podido notar existen varias formas de grabar en el trabajo legalmente y frenar cualquier tipo de abuso del que te sientas, por medio de una denuncia efectiva con pruebas en la mano.
¡Recuerda elegir el equipo que mejor se adapte a tu situación y cumplir con las disposiciones legales!